La caja no tan idiota

¿Alguna vez han estado viendo Dr. House y se han preguntado cómo ese actor (o ese guionista) sabe tanto de medicina? ¿alguna vez han pensado cómo las acciones médicas de ER son tan informativas? Todo esto a pesar de (o gracias a) la traducción. Bueno, la clave está en el guión.

"Nos guste o no la gente aprende muchas cosas por medio de la televisión" Son las palabras de Neal Baer, un antiguo profesor de primaria, actualmente productor y guonista de la series de televisión ER y Law&Order. Además de haber sido maestro de primaria, Baer tiene tres títulos: una maestría en educación, una maestría en sociología y un título de medico cirugano. Lo que explica el aparente concocimiento médico de George Clooney.

A pesar de su vocación y entrenamiento pedagógico, Baer confiesa en entrevista a Ed. Magazine que no pretende ser pedagógico en sus guiones, eso simplemente sería "pedante". Tampoco, piensa en términos de entretenimiento, lo cual "suele tener una conotación negativa de vacio mental": "No pienso en términos puros de educación o de entretenimiento" dice, "lo único que pienso es en contar una buena historia, me concentro en la narración". Baer también menciona la importancia del diálogo con su audiencia.

Baer ha producido porgramas sobre Alzhaeimer, desórdenes bipolares, adicciones. Incluso ha tratado temas como la muerte asistida y eutanasia. Una aproximación a la caja idiota muy distinta a la tristemente celebre visión del Tigre Azcarraga, quién hacia televisión para "jodidos". La culpa, como siempre, no es de la tecnología, sino de quien la monopoliza.

Las palabras de Baer me hacen reflexionar sobre una plática que tuve hace poco con mi esposa. Discutiamos (amistosamente) si, llegado su momento, deberiamos de fomentar en nuestra hija el uso de videojuegos. Uno de los argumentos a favor de los videojuego es que para jugarlos los niños deben de pensar en los algoritmos detrás de las imagenes y no solo dejarse llevar por lo que ven en una pantalla. Eso les permite desarrollar capacidades computacionales y no simples reflejos (lo que no parece convencer a mi esposa). Tal vez, la televisión sea similar, un programa con un buen guión nos permite pensar en el texto detrás de las imagenes o de la acción. El cine y mucho antes el teatro lo hacen. Ambos son considerados una arte porque explotan la narración para retar al público, a su imaginacón, comprensión y emociones. Ya los Griegos habían descubierto la catarsis como una de las funciones de la tragedia. . .